domingo, 23 de marzo de 2014

miercoles por la tarde

Hoy, por las circunstancias, me he acordado de aquellas veraniegas tardes de los miércoles de hace dos años.

Y me viene a la mente la voz ronca y lenta de Santiago Carrillo. Por entonces, a sus 97 años y prácticamente hasta su muerte, colaboraba en La Ventana de la SER con Gemma Nierga. Yo, sentado en el coche mientras esperaba a que mi mejor amigo Adrián terminase su terapia para ir a jugar al fútbol, escuchaba admirado sus sabias intervenciones en aquellas tertulias. No eran palabras que me hiciesen recordar su ideología sino, más bien, virtuosas afirmaciones y vivencias que buscaban siempre la aceptación de la perspectiva de los otros contertulios.

Carrillo era un político vocacional. Suárez también. Por algo Don Adolfo es, en tiempos de la Monarquía Parlamentaria, el último Presidente del Gobierno del Reino de España que ha dimitido. Decisión que ya no volverá a barajar ningún político de las más altas esferas jamás.